GLOSODINIA. SÍNDROME DE BOCA ARDIENTE

La glosodinia o síndrome de la boca urente en muchas ocasiones se considera una dermatosis psicógena. No obstante, aunque concomitantemente existan diversos trastornos psiquiátricos asociados, en la mayoría de casos, como depresión, ansiedad o trastornos del sueño; no existe una clara evidencia entre la glosodinia y factores psíquicos, y sí una controversia entre si los factores psíquicos son primarios o secundarios a la glosodinia.
Se define como dolor quemante en la lengua y mucosa oral, en ausencia de anomalías significativas de la mucosa. Destaca como un hecho casi constante la percepción de cambio de sabor en los alimentos. La zona de la lengua más afectada por la quemazón suele ser la punta y los dos tercios anteriores. La mayoría de los pacientes refieren intolerancia a los alimentos calientes e incluso dificultad para poder hablar con fluidez.
Clínico. El dolor quemante en la lengua en ausencia de patología dermatológica en la mucosa es diagnóstico de la enfermedad.

No obstante debemos descartar etiologías «orgánicas» del proceso como candidiasis oral, trastornos sistémicos (diabetes, menopausia), anemia ferropénica, déficit vitamina B12, déficit ácido fólico, xerostomía, reacciones alérgicas o irritativas de las prótesis, amalgamas o pastas dentífricas.
Suele ser frustrante tanto para el paciente como para el médico. Los ansiolíticos y/o antidepresivos se han consolidado como la mejor opción terapéutica (p.e. sertralina, paroxetina, gabapentina, trazodona, amisulpiride). El clonazepan y la capsaicina tópica también han mostrado eficacia.